Los
reptiles, al igual que los mamiferos, poseen de un musculo latiente
(corazón), venas, arterias y capilares.
Los reptiles presentan una
presión sanguínea más alta y un sistema circulatorio más efectivo
que anfibios, poseen una aurícula izquierda que recibe sangre
oxigenada, separada de la aurícula derecha que recibe sangre
desoxigenada, con ventrículos separados pero estan conectados, a
excepción de los cocodrilos que presentan una separación completa
siendo los primero en tener un corazón cuatripartito. El flujo
de sangre en su interior no permite mezclar la sangre pulmonar con la
sistémica, teniendo 2 tipos de circulaciones independientes
funcionalmente.
Este sistema circulatorio
puede mantener unos ritmos metabólicos altos, transportando grandes
cantidades de dióxido de carbono y oxígeno, presentando un estilo
de vida especializado y característico ya que se presentan corazones
para cada tipo de reptil, siendo estos poco evolucionados en
comparación a los de mamíferos y aves.
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